Con gran orgullo y profunda emotividad, el pueblo de Atotonilco el Alto celebró este día una de las actividades más significativas dentro del Festival Cultural por el 495 aniversario de su fundación: la Sesión Solemne de Ayuntamiento, realizada en la histórica Plaza Principal, símbolo del corazón y la identidad atotonilquense.
El acto protocolario reunió a autoridades municipales, invitados especiales, representantes de distintos sectores de la sociedad y ciudadanía en general, quienes se dieron cita para conmemorar casi cinco siglos de historia, tradición y orgullo colectivo.
Uno de los momentos más destacados y emotivos de la jornada fue la presencia del Embajador de la República de Costa Rica en México, Sr. Pablo Heriberto Abarca Mora, quien asistió como invitado especial y dirigió un mensaje fraterno a la comunidad. En su intervención, el Embajador expresó su reconocimiento al valor histórico y cultural de Atotonilco el Alto, al tiempo que destacó la importancia de fortalecer los lazos entre pueblos hermanos.
“La hermandad entre nuestras naciones no tiene fronteras cuando compartimos el mismo espíritu de identidad, tradición y respeto por la historia”, expresó durante su participación.
La Presidenta Municipal, Liliana Padilla Ramírez, agradeció la presencia del diplomático costarricense y reafirmó su compromiso de seguir impulsando el desarrollo de Atotonilco desde el orgullo por nuestras raíces, promoviendo al mismo tiempo una visión abierta al mundo.
“Hoy honramos nuestra historia con memoria y visión. Este aniversario no solo celebra nuestro pasado, sino que nos impulsa a seguir construyendo un Atotonilco fuerte, unido y lleno de esperanza”, expresó la Presidenta Municipal.
Al finalizar la Sesión Solemne, autoridades municipales, el embajador y representantes de la comunidad realizaron la entrega y colocación de una ofrenda floral en la Plaza de Fundadores, rindiendo homenaje a quienes forjaron los cimientos de este municipio. Este acto simbólico evocó el respeto y la gratitud hacia las generaciones que dieron vida a lo que hoy es Atotonilco el Alto.
Con esta sesión solemne, Atotonilco reafirma su identidad como un municipio con historia viva, donde cada generación honra a la anterior y proyecta con firmeza un futuro digno y lleno de oportunidades.
¡Sigamos celebrando lo que somos, lo que fuimos y lo que juntos seguiremos construyendo!