La protección y bienestar de las familias atotonilquenses no se dejan al azar. Requieren decisión, trabajo y gestión, y desde el primer día de esta administración, esa ha sido la ruta que hemos seguido con firmeza y compromiso.
Hoy damos un paso más en esa dirección al iniciar la renovación de 2,100 metros de tubería del sistema de alcantarillado, con un diámetro de 36 pulgadas, en una de las acciones más importantes en materia de infraestructura sanitaria que se han llevado a cabo en nuestro municipio en los últimos años.
Esta obra representa mucho más que una intervención técnica. Significa dejar atrás una infraestructura obsoleta que ya no respondía a las necesidades actuales de la población, y dar paso a un sistema moderno, funcional y preparado para brindar un servicio eficiente por muchos años más. Con ello, se protege la tranquilidad y la salud de cientos de hogares, evitando riesgos de colapsos, fugas o afectaciones derivadas de lluvias y saturaciones.
La Presidenta Municipal, Liliana Padilla, destacó que este tipo de obras, aunque no siempre son visibles a simple vista, son esenciales para garantizar servicios públicos de calidad. “Estamos construyendo un Atotonilco más seguro, más funcional y más digno. Las decisiones que tomamos hoy están pensadas para beneficiar no solo al presente, sino también al futuro de nuestras niñas y niños”, afirmó.
Este proyecto forma parte de una estrategia más amplia para fortalecer la infraestructura urbana, mejorar la calidad de vida de la población y responder a las demandas de una comunidad que merece vivir con seguridad, higiene y bienestar.
En Atotonilco el Alto seguimos cumpliendo, con obras que priorizan el bien común, que responden a necesidades reales y que reflejan el compromiso de este gobierno con la transformación positiva del municipio.